I. Contexto

Tras haber alcanzado un pico del 11% en 2022, la inflación en los países desarrollados ha ido disminuyendo. Sin embargo, recientemente ha comenzado a repuntar a medida que los bancos centrales reducen las tasas de interés. En diciembre, la inflación subió del 2.1% al 2.5% en las primeras economías a nivel mundial (Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Italia y Canadá). Los aumentos en países como el Reino Unido son de 3%, Polonia 5.3% y Estados Unidos 3%. Esto ha generado dudas sobre si los bancos centrales actuaron demasiado pronto al reducir tasas sin haber alcanzado los objetivos inflacionarios (Economist, 2025).

La inflación se convierte en un desafío para los bancos centrales, porque no quieren repetir lo vivido en la década de los 70. “En Estados Unidos, la inflación alcanzó el 12% en 1974, cayó al 5% en 1976 y luego subió al 15% en 1980. Los bancos centrales no ajustaron su política con la suficiente rapidez para evitar que el impacto del precio del petróleo en 1979 se propagara por la economía” (Economist, 2025). Solo con una enorme recesión provocada por los responsables de la política fue posible erradicar la inflación por completo.

El Banco de la República de Colombia ha mantenido una postura cautelosa respecto a la inflación y la política monetaria. En su reunión de enero de 2025, la Junta Directiva decidió por mayoría mantener inalterada la tasa de interés de política monetaria en 9,5%. Esta decisión se basó en la estabilidad de la inflación anual en diciembre de 2024, que se ubicó en 5,2%, el mismo nivel registrado en noviembre. Aunque la inflación ha mostrado una tendencia a la baja desde marzo de 2023, aún se encuentra por encima de la meta del 3% establecida por el Banco (Banrep, 2025).

El Banco ha identificado varios desafíos que podrían afectar la convergencia de la inflación hacia su objetivo. Entre estos se encuentran el incremento anual del índice de precios al productor, el aumento en el salario mínimo y un repunte en las expectativas de inflación. Además, factores externos, como las políticas del nuevo gobierno de los Estados Unidos en materia de comercio, energía y migración, podrían tener efectos inflacionarios en la economía colombiana (Banrep, 2025).

En efecto, para el mes de enero de 2025, la inflación anual en Colombia se mantuvo en 5,22%, igualando las cifras de los dos meses anteriores (El País, 2025). La variación mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) en enero fue del 0,94%, superando la registrada en el mismo mes de 2024, que fue del 0,92%. Este incremento mensual se atribuye principalmente al alza en los precios de restaurantes y hoteles (1,90%), transporte (1,71%) y alimentos y bebidas no alcohólicas (1,62%) (Infobae, 2025).

II. Metodología

Utilizando los ponderadores por nivel de ingreso del Índice de Precios del Consumidor (IPC) del Dane, se deriva el costo ciudad, un indicador que pretende medir que tan costoso es una ciudad para una persona en el Eje Cafetero. Este indicador toma el aumento que experimenta un ciudadano en cada una de las capitales en las dimensiones de alimentos, alojamientos (arriendos equivalentes y servicios públicos) y transporte. Por otra parte, a partir de una estructura estándar de costos, se calcula el efecto que tiene el aumento de salarios, energía y arriendos en muchos de los servicios, en especial los restaurantes.

III. Resultados

El costo ciudad para el Eje Cafetero en el año 2024 indica que la dinámica de precios de las dimensiones básicas de una ciudad está superando la inflación total. La mayor diferencia para la categoría de pobres y vulnerables la encontramos en Manizales y la menor en Armenia. Para la categoría de ingresos medios y altos, la mayor diferencia se encuentra en Pereira y la menor en Armenia.

Fuente: Secretaría de Hacienda de Armenia con datos Dane (2025)

Lo anterior quiere decir que para un pobre o un vulnerable, la ciudad en la que experimentará un aumento de precios mayor es Manizales, seguido por Pereira, Ibagué y Armenia. Las personas de ingresos medios y altos se enfrentarán a una dinámica acelerada de precios en Pereira, seguido por Manizales y de cerca por Ibagué, mientras que Armenia sigue siendo la de menor aumento de precios.

IV. Factores que impactarán el costo ciudad en el 2025.

Entre los factores que impactarán los precios en el año 2025 se encuentra el incremento en el salario mínimo, aumento en los precios de los combustibles de transporte (gasolina y diésel), aumento del precio del gas natural, aumento del precio de los alimentos por el fenómenos del Niño, política monetaria de Banrep y factores externos como la política externa del gobierno de Donald Trump. Para la Rap Eje Cafetero los factores que más impactarán los precios son gas natural, salario mínimo y el precio de los arriendos.

Impacto del precio del gas, el salario mínimo y los arriendos en la estructura de costos de hogares y comercios

La interacción de varios factores relacionados con el gas natural, tienen al sector energético colombiano atravesando el mayor desafío de su historia, entre ellos, la disminución de las reservas nacionales, la reducción de la producción interna, la creciente dependencia de las importaciones y la incertidumbre en las políticas gubernamentales, que en conjunto configuran un panorama complejo. Este contexto ha llevado a un ajuste en las tarifas del gas natural en varias regiones del país. Por ello, a partir de febrero de 2025, los incrementos tarifarios podrían alcanzar hasta el 36% en ciudades como Bogotá, mientras que, en el Eje Cafetero, Efigas ha anunciado un aumento del 25% en los costos del servicio. Este ajuste impacta a sectores residenciales, comerciales e industriales.

Según el Informe Anual del Mercado de Gas Natural de la Bolsa Mercantil de Colombia (2024), el potencial de producción se reducirá; para 2024 habría caído un 7,3%, para 2025 caería un 11,6% y para 2026 un 9,3%. En el último quinquenio, la producción fiscalizada cayó en 181 Gallons Per Cube (GPC), con una reducción significativa en la cuenca de los Llanos Orientales (-145 GPC) y en los campos de La Guajira (-54 GPC) debido al agotamiento de sus reservas. Estas caídas han obligado a aumentar las importaciones de gas natural, cuyo costo es considerablemente mayor que el de producción interna, con valores que varían entre los $16 y $18 por millón de British Thermal Units (BTU), en comparación con los $6 por millón de BTU del gas nacional. Además, se han generado mayores costos por regasificación y transporte desde puertos como Cartagena hacia el interior del país.

A. Efecto en los hogares

En efecto, para el caso de Bogotá, el costo de las moléculas de gas subió en dos meses el 60.1%, el transporte 49.1% y la distribución 2.3%, para un total de aumento de 42.7%, según el consultor Sergio Cabrales (Cabrales, 2025).

Entre las principales causas de estos incrementos, las empresas distribuidoras argumentan varios factores:

  • Reducción de las reservas nacionales y menor producción local
  • Necesidad de importar gas para suplir la demanda interna (antes se importaba solo para que plantas térmicas produjeran energía necesaria en temporadas de fenómenos climatológicos)
  • Incremento en los costos por regasificación
  • Mayores costos de transporte debido al cambio en las fuentes de suministro
  • Finalización de contratos de suministro a precios más bajos, lo que obliga a renegociaciones a costos más altos

El impacto de la crisis del gas natural en Armenia, puede inferirse a partir de las tendencias generales del mercado nacional y los anuncios de incrementos tarifarios en el Eje Cafetero. Efigas, la empresa distribuidora que opera en Caldas, Quindío y Risaralda, tiene previsto aplicar aumentos de aproximadamente el 25% en las tarifas. Este incremento, afecta directamente a hogares y comercios de Armenia y otros municipios del Quindío, generando una presión adicional sobre sus finanzas mensuales.

El peso del recibo del gas en el presupuesto de los hogares es de 1.02%. Sin embargo, para lo hogares pobres es de 1.60%, los vulnerables 1.49%, ingresos medios 1.06% y los altos 0.58% (Dane, 2025), por lo que un aumento en el precio reducirá su capacidad adquisitiva y limitará su acceso a otros bienes y servicios, sobre todo para los estrato 1, 2 y 3.

B. Efecto en el comercio

Comercios locales, como restaurantes, cafeterías, panaderías y lavanderías, que dependen del gas para sus actividades diarias, también se verán afectados por el aumento en las tarifas, lo que podría reducir su competitividad vía aumentos en los precios de sus productos y servicios. En el caso de restaurantes, los costos operativos se han visto afectados por incrementos de los precios de insumos agrícolas, aumentos del salario mínimo y alzas en las tarifas de arriendos y servicios públicos como agua y energía, un nuevo ajuste en el precio del gas se traduce en una nueva amenaza para la sostenibilidad de los negocios del sector.

Fuente: Secretaría de Hacienda de Armenia con datos Dane (2025)

El índice de precios al productor (IPP) registró una variación anual del 7,33% en comparación con diciembre de 2023 (aumento del IPP de 173.88 a 186.62). Este incremento indica un aumento general en los precios que los productores enfrentaron durante el año (Valora, 2025a). Solo entre septiembre y diciembre de 2024 se experimenta un incremento importante pasando de 179.93 a 186.62 en el índice, lo que equivale a un aumento de 3.72%. Iniciando el año de 2025 el índice de precios al productor sube a 188.33, lo que representa un aumento de 0.92% en sólo el mes de enero.

En el sector gastronómico, el gas natural representa entre el 3% y 7% de la matriz de costos de un restaurante, con el aumento del 25% en las tarifas de gas en Armenia, el gasto en este insumo podría elevarse entre un 0.75% y un 1.75% dentro de los costos operativos totales. Según el estudio Operación de Restaurantes en Colombia (Villanueva, 2014), el impacto varía según el volumen de ventas mensual: los restaurantes con ventas menores a $50 millones de pesos destinan aproximadamente 1.70% de sus ingresos al gas, mientras que los establecimientos con ventas superiores a $150 millones reducen este porcentaje a 0.94%. Por lo tanto, los pequeños y medianos negocios gastronómicos serán los más afectados, ya que no cuentan con economías de escala para amortiguar el impacto del aumento tarifario.

A su vez, el incremento del salario mínimo en Colombia (9,5% para 2025), que supera la inflación del 5,20% registrada en 2024, ejerce presión sobre los costos operativos de sector. A pesar de los esfuerzos gubernamentales por desvincular algunos elementos del cálculo del salario mínimo, la indexación de los salarios de los meseros a este incremento salarial tiene un impacto directo en la estructura de costos de los restaurantes. Concretamente, la inflación de las comidas en establecimientos con servicio a la mesa o autoservicio alcanzó el 2,27% solo en enero de 2025, lo que representa más del doble del incremento experimentado por la canasta familiar en su conjunto (1,01%) (Dane, 2025).

De acuerdo con el gremio, este nuevo aumento en el gas podría traducirse en un alza del 10% al 15% en los precios de los platos servidos, dependiendo del modelo de negocio y el nivel de consumo de gas en cada restaurante. En ciudades como Armenia, Pereira y Manizales, donde la competencia entre establecimientos es alta y los márgenes de utilidad estrechos, trasladar estos costos al consumidor final podría afectar la demanda y reducir la capacidad de recuperación del sector tras la pandemia y la desaceleración económica.

Para Brany Prado, director ejecutivo de Acodres Pacífico “en Colombia están operando más de 150.000 establecimientos, según los datos disponibles a diciembre de 2024. Si se compara con el 2023, el aumento fue solamente del 2%. Si bien se da un crecimiento, no refleja en nada la buena dinámica que se traía del año 2022 que fue de 11,3%.” (Portafolio, 2025).

Sobre una estructura de costos estándar de una actividad comercial (restaurantes y otros), los aumentos en salarios, arriendos y gas estarían impactando los costos aumentándolos el 3.65%, porcentaje que debe ser descontados de los beneficios del negocio, porque cada vez es más difícil trasladarlo a los precios.

Fuente: Secretaría de Hacienda de Armenia con datos Villanueva (2014)

Esto hace que el sector presente una alta informalidad. El precio de un corrientazo es de $13.000 en un restaurante informal mientras que en uno formal puede ser de $20.000. “A los consumidores les puede beneficiar para tener un mejor flujo de recursos para comprar fuera de la casa, pero al interior de los establecimientos el costo operativo sigue siendo alto porque todavía tenemos productos que sostienen los precios. Por ejemplo, la papa ha tenido un incremento del más de 170% en los últimos cinco años. Ahora, la preocupación gira en torno a variables como el aumento de los servicios públicos y los arriendos.” comenta Brandy Prado (Portafolio, 2025).

Las tiendas de barrio es otro sector que está afrontando muchas dificultades y la más importante tiene que ver con la disminución de las ventas. “Aseguran que el golpe también se siente a cuenta de los altos costos de los servicios públicos y arriendo en sus locales, el impuesto saludable, que aumentó el costo de las bebidas azucaradas y los alimentos ultraprocesados. (Valora, 2025b). Fenalco indica que “(…) de acuerdo con el IPC del DANE, mientras en enero la inflación total fue de 5,22 % y la de alimentos y bebidas de 4,49 %, los precios al consumidor final de bienes como las golosinas crecieron un 53,48 %.” (Valora, 2025b).

La medición hecha por Fenalco y Fenaltiendas indica que hay 450.000 tiendas a nivel nacional donde un millón de familias dependen de los ingresos de estos negocios y adicionalmente indican que en el segundo semestre de 2025 (Valora, 2025b):

  • El 82% de las tiendas disminuyó sus ventas el 53% o las mantuvo igual 29%.
  • Solo el 17% mostró aumento en sus ventas.

Los incrementos en costos agregando un aumento de insumos con el 4% de la inflación proyectada para el año 2025 y con igual porcentaje los servicios, da como resultado que el incremento en la estructura de costos sería del 4.93%. Los “comerciantes de las tiendas de barrio en Colombia consideran una fuerte competencia el canal moderno, autoservicios, vendedores ambulantes, minimercados, grandes superficies y auto venta, entre otros” (Valora, 2025b), con lo que les impide cada vez menos trasladar el aumento de precios al consumidor, por lo que deben terminar disminuyendo sus ganancias para seguir operando.

Fuente: Secretaría de Hacienda de Armenia con datos Villanueva (2014)

En respuesta a esta situación, el sector gastronómico del Quindío ha solicitado medidas de alivio por parte del gobierno y las entidades regulatorias. Entre las propuestas planteadas se encuentran la implementación de subsidios temporales para pequeños establecimientos, la promoción de programas de eficiencia energética para reducir el consumo de gas y la posibilidad de negociar contratos de suministro a largo plazo con precios más estables. Sin embargo, las expectativas de solución inmediata son limitadas, ya que la situación del mercado energético sigue dependiendo de factores estructurales como la disponibilidad de reservas nacionales y las condiciones de importación de gas.

Referencias

Banrep. (2025). La Junta Directiva del Banco de la República decidió por mayoría mantener inalterada la tasa de interés de política monetaria en 9,5%. https://www.banrep.gov.co/es/noticias/junta-directiva-enero-2025

Cabrales. (2025). El recibo del gas en Bogotá aumentó un 42% en los últimos dos meses. https://x.com/SergioCabrales/status/1894012569536303434?t=d51zL0ooPFBJDVCCZrOSfg&s=08

Dane. (2025). Ponderaciones históricas del IPC. DANE – IPC información técnica

Economist. (2025). Investors fear inflation is coming back. They may be right. The Economist. Finance & economics | As the balloon goes up. Investors fear inflation is coming back. They may be right

El País. (2025). La inflación se estanca en enero en el 5,22%. https://elpais.com/america-colombia/2025-02-07/la-inflacion-se-mantiene-en-enero-en-el-522.html

Infobae. 2025. Inflación en enero de 2025 muestra leve aumento anual y presión en costos mensuales, así quedó. https://www.infobae.com/colombia/2025/02/07/inflacion-en-enero-de-2025-muestra-leve-aumento-anual-y-presion-en-costos-mensuales-asi-quedo/

Portafolio. (2025). Casi 7.000 restaurantes fueron cerrados el año pasado, según Acodres Pacífico. Acodres afirma que el año pasado se cerraron casi 7.000 restaurantes | Empresas | Negocios | Portafolio

Valora. (2025a). Índice de Precios al Productor de Colombia subió el 7,33 % al cierre de 2024. Valoraanalitik. https://es-us.finanzas.yahoo.com/noticias/%C3%ADndice-precios-productor-colombia-subi%C3%B3-202000166.html

Valora. (2025b). Comerciantes alertan que crisis de las tiendas de barrio en Colombia se agrava “significativamente”. https://www.valoraanalitik.com/tiendas-barrio-colombia-crisis-se-agrava/

Villanuaeva. (2014). Operación de Restaurantes en Colombia. Acodres, Fontuor, Mincomercio. Operación-Restaurantes-Final-Marzo.pdf

OpenAI. (2023). ChatGPT. Soporte a la elaboración del artículo. https://chat.openai.com/chat

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